El diseño puede ayudar a una empresa a destacarse de la competencia al crear un estilo visual único y un aspecto que lo diferencie de otras marcas.

El diseño puede evocar emociones y crear una conexión con los clientes apelando a sus sentidos, como la vista, el tacto y el sonido. Esto puede ayudar a construir una conexión emocional más fuerte con los clientes y aumentar la lealtad a la marca.

El diseño ayuda a garantizar la coherencia de la marca mediante la creación de un conjunto de pautas de diseño que se aplican a todos los materiales de marketing. Esto incluye elementos como logotipos, tipografía, paleta de colores e imágenes. El diseño consistente ayuda a reforzar la identidad de la marca y aumentar el reconocimiento entre los clientes.